Las piezas de una moto están diseñadas para soportar la lluvia, pero hay que tener cuidado a la hora de lavarlas. Puedes usar la manguera a una distancia prudencial, para quitar la suciedad en la parte frontal, neumáticos y llantas.
Pero, los expertos explican que lo mejor es limpiar la moto a mano y debe estar fría para evitar quemarte accidentalmente. Para limpiar la moto necesitas un par de cubos, esponja, guante de alta absorción, varios trapos o bayetas de microfibra.
En un cubo añade agua y jabón específico para carrocerías, y otro solo con agua tibia. Antes de limpiar debes proteger la boca del escape u otros elementos con una bolsa de plástico.
Empieza limpiando las zonas más expuestas a la carretera como los neumáticos, llantas, suspensiones, motor y la cadena. Para limpiar esas zonas utiliza el desengrasante y deja actuar entre 5 y 10 minutos, para que ablande bien la suciedad.
Una vez haya pasado el tiempo, aclara la moto con agua, pero comienza por la parte superior, para que la suciedad vaya cayendo y no manche las zonas ya limpias.
La parte frontal suele tener insectos incrustados, así que remoja bien esa zona para ir ablandado los restos. Mientras se reblandece todo, continua lavando el resto de la moto.
Después, puedes utilizar un desengrasante genérico, pero no debes aplicarlo directamente. Todos los desengrasantes se tienen que diluir por partes iguales de agua. También puedes utilizar una proporción de 1/3 de producto y 2/3 de agua.
Con mucho cuidado, tienes que rociar la mezcla anterior para quitar la grasa de la moto y deja que actúe durante un minuto. Enjuaga bien con agua y debes secarla de arriba abajo con una bayeta de microfibra.
Sino sabes dónde limpiar la moto. Desde Motocard informan que «evidentemente, si tienes garaje y espacio, es el sitio perfecto. ¿Qué no tenemos un lugar parecido? Pues te vas a una gasolinera de estas que tienen espacios para lavar. Además, suelen tener una pistola de agua a presión y jabón de alquiler».
Es fundamental llevar un casco que cumpla las homologaciones de seguridad. La homologación asegura que el casco correspondiente ha pasado las pruebas anti choque más exigentes a las que obliga la UE.
Si el conductor usa un casco no homologado, está penalizado con 300 euros de multa y la retirada de tres puntos.
El casco debe permanecer bien ajustado. Si usas gafas no compres una talla mayor, porque en caso de caída lo más probable es que las gafas salgan despedidas y el casco al no estar ajustado pierda su efectividad.
En el mercado encontrarás muchos modelos de casco que incorporan ya canalizaciones interiores para las varillas de las gafas. También es importante limpiar el casco, así que para eliminar la parte exterior puedes utilizar agua y jabón.
Te aconsejamos que lo limpies con un paño, pero hay que tener cuidado con la pantalla del casco, ya que una mala limpieza puede hacernos perder visibilidad. Unas gotas de limpiacristales son suficientes.
Si estamos ante un casco con piezas desmontables, puedes limpiar las partes interiores en la lavadora con un programa suave de corta duración.
Debes saber que un motorista necesita viajar con ropa y guantes adecuados. Los profesionales de Delirium Cross, especialistas en equipación para moteros, explican que en verano es aconsejable ir equipado con una buena chaqueta técnica, un pantalón y unos guantes, estos sí específicos de verano.
El motorista también puede llevar botas para evitar sufrir quemaduras más graves, ya que en verano el asfalto alcanza las temperaturas más elevadas.
Los expertos explican que en la parte exterior de las botas es donde más suciedad se acumula. Limpia tus botas de cuero o piel con agua y jabón. Se recomienda aplicar cremas protectoras para evitar que se deterioren.
Para airear el interior de las botas, te aconsejamos que abras al máximo la caña de la bota para que penetre el aire. Para eliminar posibles humedades coloca un papel de diario dentro de la bota y puedes ir sustituyendo hasta que salga seco.
Elige unas botas ligeras y bajas, que te proporcionen buen tacto con el pedal y que estén bien ventiladas. No puedes conducir con las chanclas para la playa o la piscina.
Evita los pantalones vaqueros, porque son más calurosos y no son impermeables. Para el verano puedes llevar guantes cortos, ligeros y que permitan mucho tacto con la moto.
Las motos y los ciclomotores también tienen que pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Circular sin superar la ITV conlleva una multa e incluso la inmovilización del vehículo.